Se dice que…La lumpemburguesía posadeña comenzó a comprar radicales ante el creciente rumor de su escasez y desaparición política. “Es un negoción”, gritan los mercaderes de la Tierra Sin Mal. La cotización de un radical con los ideales de Raúl Alfonsín puede valer millones de pesos ante el cobarde éxodo a la Libertad Retrocede de sus principales referentes Martín Arjol y Pepe Pianesi. El radicalismo genuflexo macrimileísta vendió  sus servicios al PRO. El dato de color es que en 40 años de democracia nadie insultó tanto a Raúl Alfonsín como  el demente de Javier Milei. Los radicales de origen y hoy fervientes misioneristas, Maurice Closs y Hugo Passalacqua, manifestaron públicamente su indignación por los dichos del inestable candidato a presidente. Otro dato es que a pesar de que Javier Milei eliminará la educación universitaria gratuita nadie de los “boinas tibias” levantó la voz. La perla es que si Sergio Massa es electo presidente comenzará una caza de brujas “a puro carpetazos” dentro del partido centenario. “El votante de Milei de clase media alta es en esencia una persona acomplejada que ya no soporta su vida vacía y superficial”, reflexiona un respetado concejal radical posadeño que se alista para la toma del poder de su partido y a su vez propone denunciar en la AFIP a todos los evasores de la Isla del Medio.

¿Macri y el PRO no son casta?