Se dice que…Consideran que la información oficial y la transparencia no han sido puntos fuertes en la actual administración del ministerio de Desarrollo Social. “Benilda Dammer tenía expectativas distorsionadas de lo que es el manejo de la cosa pública y no se percató que el millonario presupuesto que tiene asignado su ministerio es para palear las necesidades de los misioneros y no es de su entorno familiar” dice a su seguidoras una poderosa ex ministra renovadora que encabeza el inusual pedido de auditoría externa y control de gastos. El dato de color es que Benilda Dammer habría comprado, en plena cuarentena, una hermosa casa en el barrio Los Aguacates de Posadas y habría realizado la operación inmobiliaria en las oficinas del ministerio. Más allá de la falta de ética, estarían las imágenes del momento del ingreso y egreso al edificio público del día y horario de la transacción comercial, que fue un sábado en plena cuarentena estricta en Misiones.