Se dice que…La legisladora provincial de la Renovación estaría siendo muy cuestionada por sus pares al salir a la luz ciertas maniobras poco transparentes. Natalia Rodríguez habría llegado a la política financiada por laboratorios nacionales y estaba haciendo lobby para su verdadero objetivo que era la comercialización del aceite de cannabis, pero no lo pudo lograr, según fuentes confiables. El dato de color es que como defensa ante el escrache mediático, Natalia Rodríguez contó que dos familiares “indirectos” de un famoso locutor y dueño de una radio, que pretende marcarle la agenda diaria al esquema misionerista, están “contratados” como planta permanente en la Legislatura.